05 Oct DIA MUNDIAL DE LA PARÁLISIS CEREBRAL

¿QUÉ ES?

La Parálisis Cerebral Infantil es la discapacidad más frecuente en la infancia, existiendo otras patologías similares o síndromes neurológicos que cursan con un pronóstico similar según la evolución de los primeros años.

Se define como un grupo de cuadros caracterizados por disfunción motora secundaria a un daño cerebral no progresivo en las primeras etapas de la vida.

¿QUÉ SABEMOS?

El impacto que tiene en las familias de los pequeños varía en función de la intensidad de la afectación. Nuestra acción profesional debe estar orientada hacia la mejora de la autonomía y calidad de vida del niño y la de su familia.

Comprender la dimensión del problema nos ayudará a mejorar nuestras expectativas y ajustarnos a lo que el niño necesita en cada momento.

Su afectación se modifica con el crecimiento y el desarrollo del niño. Los cambios también depende de la forma en que el paciente utiliza su cuerpo. Las diferentes terapias enfocadas en la atención temprana contribuye de manera muy positiva a la función corporal.

HACEMOS EQUIPO

La importancia de las sinergias profesionales entre los especialistas implicados parte de compartir clasificaciones, método de evaluación, principios de tratamiento y objetivos funcionales.

Entender el papel que cada uno de ellos desempeña y la importancia de su cooperación para desarrollar estrategias ante problemas como la falta de fuerza, equilibrio, control motor, o exceso de tono muscular, alteraciones cognitivas, problemas de conducta, es importante para seguir progresando.

POR QUÉ ES IMPORTANTE EL ABORDAJE TERAPEUTICO?

La terapia debería significar un progreso para que el niño pueda integrar las actividades aprendidas en habilidades funcionales.

 El terapeuta deberá contar con una evaluación detallada, basada en las necesidades y desempeño funcional de cada caso, a fin de elaborar un programa de tratamiento acorde a las circunstancias de su familia.

 La terapia implica cambio. Cambio a nivel neuronal, a nivel estructural, nuestro sistema se adapta y se amolda ante un estimulo para poder apreciar cambios, en la movilidad, en la participación, en la conducta, en diferentes destrezas, en su independencia.

Es muy importante que estos cambios y progresos los acompañemos y potenciemos en casa durante sus actividades del día a día, pues solo se integrarán cuando las adquisiciones de nuevas habilidades las introduzcamos en un entorno real con las adversidades que ello implica.

Cuanto antes mejor. La capacidad que tiene nuestro cerebro de utilizar mecanismos de adaptación funcional que permitan minimizar los daños después de una lesión, asi como la habilidad para adquirir nuevos conocimientos hacen de la maleabilidad cerebral una característica única y útil en la rehabilitación.

Cualquier tipo de inmovilidad amenaza el crecimiento y el desarrollo musculo-esquelético, que conduce a deformidades y complicaciones futuras.

El aprendizaje funcional implica una organización del movimiento e incorpora diferentes construcciones de memoria, esquema y programa motor, y ello comprende un proceso cognitivo.

El niño deberá ser participante activo en el proceso de aprendizaje.